El presidente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), Alberto Carlocchia, resaltó que el país “no puede seguir prohibiendo actividades económicas que generan desarrollo”, y aseguró que “nadie” en la industria quiere la minería contaminante ni desarrollar un proyecto arriba de un glaciar.
“Yo me opongo a la minería contaminante, porque sé que hay minería no contaminante. Que tiene impactos es cierto, pero no una contaminación, y tiene algunos que pueden ser negativos a mitigar o corregir, pero también muy positivos que no se pueden dejar de lado por temor”, afirmó el titular de la entidad que nuclea a las grandes empresas mineras en entrevista con Télam
A partir de la adhesión al programa global “Hacia una Minería Sustentable“, la industria local “está siendo pionera por haber escuchado a la sociedad, por haber abierto la cabeza y poder comunicar, explicar, tener dialogo y buscar el camino correcto” para ganarse la llamada licencia social de la actividad.
“La razonabilidad tiene que primar, el sentido común nos dice que como sociedad necesitamos darle alternativas a la ciudadanía que hoy no está incluida en el desarrollo de la Argentina y la minería está en posibilidad de hacerlo”, expresó al defender a la actividad como vector de crecimiento y construida en línea con los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS).
Durante la charla, el titular de CAEM también se refirió a la afectación que el sector considera que plantea la Ley de Glaciares, sobre lo cual dijo que “dentro del desarrollo de cada proyecto hay que prestarle mucha atención a esta legislación y como dijo la Corte Suprema es indispensable un trabajo común entre cada provincia y la Nación para darle un marco de contención apropiado”.
“Nadie quiere hacer un proyecto minero encima de un glaciar. Por el contrario, va a estar cuidado y controlado. Para eso existen los informes de control ambiental cuya potestad tienen las provincias de aprobar o pedir mejores condiciones”, aseguró el directivo al señalar que “debe haber una política estratégica desde el Estado para darle la atención apropiada al tema glaciares”.
También en torno al tema ambiental y el desarrollo de la actividad, Carlocchia entendió que “Argentina debe ser el país que más legislaciones prohibitivas tiene de toda índole, y en materia minera tiene más jurisdicciones que la prohíben que todo el mundo en su conjunto”.
En ese sentido, se refirió al debate en curso por la autorización de la minería metalífera en las provincias de Mendoza y Chubut que restringen el aprovechamiento de importantes proyectos, sobre lo que admitió que “se está generando un diálogo muy auspicioso, que institucionalmente CAEM acompaña sin forzar ni imponer nada”.